¿Sí, señora? No llore, por favor, no la entiendo ¿Cómo? Sí, sí, la hemos encontrado. Sí, en el bosque. ¿Perdón? ¿Quiere saber cómo está su h...

La mujer avanzaba entre la multitud, sosteniendo al niño entre sus brazos. Nadie prestaba atención, nadie le miraba. Hora punta, salid...

Como todas las mañanas, mamá me prepara el desayuno. Sonríe mientras me sirve la leche. Papá me pasa la mano por el pelo, bromea. Me ha...

En mi piscina habita el fantasma de un niño ahogado. Se acurruca en un rincón y con mirada triste me suplica que la llene.

Ella trabaja en una guardería, él es gerente en una gran empresa. Han discutido por la niña, como siempre. Asia –así se llama su hija, el ...

Siempre he sentido predilección por los géneros literarios considerados menores —entre ellos, por ejemplo, la ficción mínima, que tan a...

¡Primero las mujeres y los niños!, gritó el capitán, y los tiburones exhibieron sus mejores sonrisas mientras esperaban.

...basílicas de escombros, levantadas trombas  de fuego, sangre, cal, ceniza. Rafael Alberti tuve la certeza de que, una vez ...

Cuando cayó en mis manos por vez primera una novela de corte fantástico, no una de aquellas donde brotan por doquier dragones y caball...

«No había previsto que ese recuerdo me iba a atenaza! de forma tan mala. Creo que es por el olor de las quemaduras, creo que no es n...

Si terminase así el pueblo, resultaría de una fórmula de perfección o de simulación intelectualista Gabriel Miró Cuá...